La edad es solo un número.

Ella es Ernestine Shepherd y al día de hoy tiene 83 años.

                              

                                             

Él es Sam Bryant y tiene 76 años.

                           

                           

¿Qué tiene en común? Los dos son abuelos y los dos demuestran que la edad es sólo un número cuando se quiere conseguir algo.

Estos dos señores pueden fácilmente dejar en vergüenza y evidencia a cualquier persona de vienti tantos años en fuerza, salud y agilidad.

Ellos son parte de otros abuelos que llevan sus años entrenando y cultivando su propia salud y apariencia física porque esto es un asunto más mental que físico.

Ejemplos a seguir y espejos en los cuales reflejarse siempre habrán en casa aspecto de la vida pero ellos dejan muy claro que si usted no logra algo es simplemente por PEREZA, VAGANCIA O DESINTERÉS.

Con esto no le estoy tratando de convencer que entre a un gimnasio a hacer culturismo; nada más lejos de la realidad. Lo que deseo que entienda es que su salud y estado físico pasan, en buena parte, por su responsabilidad.

A menos que tenga una enfermedad infectocontagiosa, autoinmune o hereditaria, entienda que sus padecimientos, todos, vienen por consecuencia de lo que usted come.

Por eso, creo que va siendo hora que tome por los cuernos a su propio cuerpo y le ordene como comportarse ante el pasar de los años y a su salud como quiere que sea desde hoy en adelante.

A menos que la otra vida nos llame antes, todos llegaremos a la vejez y tenemos dos caminos que elegir al llegar ahí: uno, lleno de enfermedades, dolores críticos, medicaciones y dependencia de otras personas para todo o, uno, donde usted se vale por si mismo, goza de una salud tremenda, de fuerza, agilidad y buena condición física.

¿Cuál va a elegir desde hoy?

La primera opción, no es opción.

Despierta y cambia tu futuro con un presente que dé gusto vivir.